Yo Soy Gusano
Hará unos días advertí a un amigo antes de involucrarse en
un acto que yo consideraba poco ético... a lo que él me respondió: “ Sheila, en
esta vida tienes que elegir, ser gusano o anzuelo”
Me quedé unos minutos pensando. ¿Será ese mi problema? ¡Pude
ser anzuelo tantas veces!, salir por la puerta grande, yo pude ser la mujer de
hierro, yo que siempre fui el sol que más calienta rodeada de gente que me
bailaba el agua. Nada me impedía ser malvada. Yo, hermosa, inteligente y con
talento pude machacarte sin pestañear. Si a mí no me hubiera apetecido tú no
tendrías nada de lo que te rodea, vivirías en el infierno del anonimato y de la
soledad de la que yo te saqué.
Sin embargo, me serví de todas mis virtudes y oportunidades para
que tú también las disfrutaras. En el mismo lugar donde yo tuve que aporrear la
puerta hasta derribarla, tú te la
encontraste abierta de par en par y mientras yo te sujetaba la puerta, sonreía
invitándote a pasar. Yo sequé tus lágrimas, vi la magia en tus ojos cuando
nadie te miraba. Yo, de profesión salvadora de causas perdidas.
Ahora que ha pasado el tiempo, que donde yo pensaba que
disfrutaba de una amistad, tú solo estabas cogiendo impulso, sé que elegí ser
gusano. ¡Vuela alto!, ¡vuela alto!, a ver hasta donde te llega el hilo. Yo
también fantaseo con ser anzuelo, parece que desde esa posición todo funciona
mejor.
Un gusano que ya es mariposa, y que vuela bien alto y sin nada de lo que avergonzarse!
ResponderEliminarInteresante forma de ver a los gusanos. Lo describes de tal forma que de pronto los gusanos resultan atractivos. Yo que también soy gusano, me siento ahora mucho más viva. Gracias.
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